El terremoto de 1822 dejó al principal puerto de Chile, Valparaíso, devastado. El único registro de carácter científico que hay de este suceso es el diario de la viajera y naturalista inglesa Marie Graham, que según el geofísico Jaime Campos, es el puntapié inicial para la existencia de la sismología en Chile.
Por: Catalina Moya Catalán
“A las cuatro hubo otro violento remezón. En el intervalo entre éste y el anterior había temblado sin interrupción, a veces con movimientos contrarios en direcciones, por lo común, Norte y Sur. A las seis y cuarto, otro. Desde esa hora la agitación de la tierra ha continuado con suficiente fuerza para mover y aun derramar parcialmente un vaso de agua, y aunque el suelo tiembla todavía bajo mis pies, no hemos tenido ningún motivo especial de alarma. Escribo esto a las cuatro p.m”.
Este extracto pertenece al último capítulo del libro “Diario de su residencia en Chile (1822) y de su viaje al Brasil (1823)” de la naturalista Marie Graham. No solo es un registro detallado de todos los movimientos telúricos que hubo desde el día 20 al 23 de noviembre en la zona central de Chile, sino que también es una guía etnográfica de la época, que revisa los comportamientos, las fiestas, los paisajes, la arquitectura y la idiosincrasia del Chile colonial.
“Yo me atrevería a decir que es el primer texto estrictamente científico de los terremotos en Chile”, señala Jaime Campos, geofísico y asesor científico del PAR Explora RM Sur Poniente
Dibujos de Marie Graham
En este sentido, el aporte que entrega este libro en términos históricos, sociológicos y científicos es incuantificable. “Cuando te encuentras con la descripción del terremoto de Marie Graham ves el relato de una naturalista. Ella describe el paisaje con unos dibujos preciosos, tiene una observación deductiva con la que saca conclusiones propias, explica cómo se deforma el borde costero. No hay otra descripción con ese nivel de detalle de esa época, y es porque ella estaba interesada en las características naturales, por lo tanto, su observación fue mucho más sublime. Es por esto que me atrevo a proponer, sin ninguna duda, que la sismología en Chile nace con ella”, explica el académico.
Los terremotos son parte de la identidad de nuestro territorio, en los relatos de los pueblos originarios los encontramos a través de representaciones mitológicas como, por ejemplo, Cai Cai y Tren Tren. Más adelante, en plena colonización, encontramos relatos de obispos españoles que, en el año 1647, al enfrentarse a un terremoto, hicieron una descripción detallada de los daños para que el Virreinato del Perú gestionara la suspensión de impuestos. Estos relatos son las únicas evidencias de los movimientos de la tierra antes del texto de la escritora inglesa.
Marie Graham nació en Inglaterra en 1785, era hija del vicealmirante Jorge Dundas a quien acompañó en un viaje a la India, donde se casó con el capitán de marina Thomas Graham. El matrimonio emprendió un viaje a América del Sur y, a la altura del Cabo de Hornos, Marie Graham enviudó por una enfermedad que atacó a su marido. Cuando embarcó en el puerto de Valparaíso, en el año 1882, para darle entierro al Capitán Thomas Graham, en vez de volver a Inglaterra decidió quedarse, y fue ahí donde escribió un diario de su estadía. Además, dibujó, pintó, escribió crónicas, ensayos y visitó todos los lugares que pudo, preocupándose siempre de observar de manera detallada a personas, paisajes, vestimentas, casas y costumbres.
Dibujos de Marie Graham
“Marie Graham era una científica, tiene pensamiento deductivo científico, ella hizo un análisis tan detallado como Darwin, pero siempre se cita a Darwin nunca a Marie Graham”, argumenta Jaime Campos. Sobre el valor de su trabajo para la sismología, el científico destaca la entrega de información objetiva de los acontecimientos. “Más allá de todos los mitos, teorías, creencias en torno a los movimientos telúricos, su registro corresponde a datos de relevancia para el estudio y la posterior conformación de una disciplina, desde una mirada muy distinta de como se venía explicando este fenómeno en esa época”.
Gente persignándose, muchachas rezando el rosario en las calles, sacerdotes haciendo misas fuera de las iglesias, son algunas de las escenas que describe la viajera en su diario sobre cómo la sociedad de ese entonces estaba enfrentándose a las réplicas del terremoto. Es decir, la tónica era la atribución a una fuerza superior fuera del entendimiento humano. Y aunque la ciencia ya tenía una teoría para los terremotos, que no había sido reemplazada desde el siglo cuarto antes de Cristo, esta no explicaba bien de dónde venían.
Hasta 1889, los terremotos se explicaban bajo la teoría aristotélica, que decía que estos movimientos correspondían a vapores a presión que salían de la tierra a través de fisuras. En 1840 se demuestra que los terremotos correspondían a movimientos elásticos que solo podían demostrarse en cuerpos perfectos, que no era el caso de la tierra, un cuerpo heterogéneo con agua subterránea, magma, cráteres, entre otras cosas. Cincuenta años después, en 1889 se descubre que eso sí puede ser demostrable en la heterogeneidad de la tierra, este hecho simbólico da origen a la sismología. Pero con el terremoto de 1906 de San Francisco en Estados Unidos, los científicos se dan cuenta de que es la tierra la que se fractura y ahí recurren a los relatos de Darwin, no así a los de Marie Graham que transitaban por el mismo camino de evidencia.
Dibujos de Marie Graham
“Es necesario reivindicar la figura de Marie Graham no solo como artista, escritora, dibujante y pintora, ella es precursora de la sismología en Chile gracias a una mirada desprejuiciada que no repitió el dogma, hace un razonamiento sobre los minerales, las montañas, la geografía y su descripción es un aporte fundamental para la teoría actual de la tectónica de placas”, explica Campos.
Chile se encuentra en el cinturón de fuego del Pacifico y es el país más sísmico del mundo. Mucho hay por aprender aún de cómo son estos sismos. El trabajo de Graham fue una primera aproximación, pero diversos estudios posteriores y esfuerzos del mundo científico buscan divulgar a la ciudadanía el conocimiento que se tiene sobre ellos. Una oportunidad de conocer cómo se estudian los temblores, cómo se miden y cómo esto aporta a evitar desastres es lo que ofrece la muestra Exposismos. Esta exposición estará hasta el 22 de agosto en el Cerro Santa Lucía, a un costado de la feria indígena, y todos y todas están invitados/as a visitarla.
Para leer el libro de Marie Graham puedes descargarlo desde aquí
