Las infecciones respiratorias son una de las patologías más frecuentes durante los meses de invierno. Sin embargo, la incidencia no ha disminuido en nuestro país y se declaró alerta sanitaria preventiva durante la primavera. La microbióloga Susan Bueno del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia (IMII) investiga la genética molecular de los patógenos que causan la neumonía, a fin de identificar métodos de diagnóstico certeros.

La neumonía es una infección pulmonar microbiana –bacterias o virus-, que produce una respuesta inflamatoria que afecta gravemente la función de intercambio de gases (adquirir O2 y eliminar CO2) de este órgano vital. Ancianos y niños son los más susceptible a estas infecciones. En el primer caso porque se observan serios casos de infección por inflamación debido a cambios en el sistema inmunológico; mientras que en el segundo porque sus vías áreas están en pleno desarrollo.

A nivel mundial, la neumonía es la principal causa individual de mortalidad infantil. La Organización Mundial de la Salud estima que en 2015, unos 922.000 niños menores de 5 años fallecieron a causa de esta, lo que supone el 15% de todas las defunciones de niños menores de 5 años en todo el mundo.

La Dra. Bueno estudia los mecanismos moleculares para prevenir una inflamación excesiva en el pulmón causada por infecciones bacterianas o virales. Su trabajo con bacterias respiratorias busca generar mecanismos de diagnósticos que permitan al personal clínico, determinar si está frente a una enfermedad respiratoria moderada o severa. “En la actualidad, una bacteria respiratoria se trata con antibióticos, pero no te sirve eliminar al microorganismo únicamente, sino que también es necesario apagar la respuesta inflamatoria para no producir daño al pulmón”, señala. Asimismo, para prevenir la inflamación excesiva se emplean corticoides, pero este tipo de drogas de amplio espectro provoca efectos adversos sobre el sistema inmunológico. La búsqueda de nuevas moléculas para tratar la infección bacteriana permitirá identificar blancos terapéuticos específicos y no apagar completamente el sistema inmune, como lo hacen los corticoides.  

Staphylococcus aureus es su modelo de estudio para investigar los mecanismos del sistema inmune que limitan la inflamación producida por la infección pulmonar y de piel; mientras que la bacteria respiratoria Klebsiella pneumoniae, que a su vez es multi-resistente a antibióticos, le permite describir los mecanismos moleculares de virulencia.

La segunda área de investigación de la Dra. Bueno se relaciona con la neumonía causada por virus en niños menores de un año. El Metapneumovirus humano, al igual que las bacterias respiratorias, también le ayuda a la identificación de marcadores moleculares que darían cuenta de la inflamación excesiva a nivel del pulmón. 

Pero ¿cuál es la respuesta inmune que genera este microorganismo? En términos de mecanismos moleculares, el metapneumovirus modula una respuesta inmune ineficiente a la hora de eliminar el patógeno, que desencadena una reacción inflamatoria exagerada y provoca daño pulmonar. Por ejemplo, en el caso de las personas que tienen predisposición para asma, la infección por este tipo de virus es dañina porque produce una respuesta inflamatoria muy exacerbada. La Dra. Bueno investiga las moléculas que se están produciendo en exceso durante la infección para atacarlas y reducirlas independientemente del virus. 

Perspectivas y pruebas clínicas

Las perspectivas de estos estudios serán identificar marcadores específicos de cada tipo de microorganismo que causan infección respiratoria, a fin de generar mejores métodos de diagnóstico. “Tenemos una colaboración con médicos pediatras e infectólogos de la Facultad de Medicina UC, de la Red de Salud UC y del Complejo Asistencial Dr. Sótero del Río, con quienes estamos haciendo un estudio para identificar nuevos métodos de diagnóstico de patógenos respiratorios, así como la evaluación de citoquinas que están elevadas a nivel del tracto respiratorio en personas infectadas. Esta colaboración ha permitido reclutar varios pacientes, particularmente niños, y se está trabajando en identificar el tipo de microorganismo causante de la infección y el patrón de las citoquinas inflamatorias que serían las moduladoras de la inflamación en el pulmón”. Estos estudios permitirán identificar, a nivel de consulta médica, el tipo de microorganismo patógeno causante de la neumonía y su severidad.