Cómo se forman, cuánto miden y cómo cambian las estrellas, es lo que se trató de esquematizar en la primera sesión de Astronomía para Párvulos, iniciativa generada por el PAR Explora de CONICYT RM Norte y el Departamento de Astronomía de la  Universidad de Chile. 

 

Las estrellas son como los autos, las hay de diferentes años, tamaños y colores, esto, así como otras metáforas y contenidos didácticos, es lo que explicó Víctor Salinas, monitor y divulgador de contenidos del Departamento de Astronomía de la Universidad de Chile.

A partir de la estrella más grande y cercana, el Sol, Víctor enseñó a las Educadoras de Párvulos participantes, mediante analogías fáciles de comprender y asociar, cómo es que las estrellas producen luz y tienen similitudes entre ellas. 

Además, agregó, uno de tantos datos curiosos para lograr dinamismo durante el desarrollo del curso: “El Sol no se va a gastar, lleva 4.500 millones de años de vida y todavía no llega a la mitad de su existencia. Recién a los 10.000 años comenzará a agotar la energía en su núcleo”. 

Ejercicios simples como tapar el Sol y la Luna con el dedo meñique, ya que tienen el mismo tamaño angular, comparar la masa coronal de la estrella más grande del universo con tallarines, o esquematizar las distancias de los planetas usando bolitas de plumavit y una nave espacial de plástico, pueden ser juegos útiles al momento de enseñar a las pequeñas y pequeños. 

“Cuando el profesor presenta la distancia del Sol y los planetas, me hace pensar en lo concretos que son los niños. De hecho, una vez trabajé el tema con ellos y me preguntaban por los marcianos. Así, se me ocurre que hablar de distancia con ellos quizás es más fácil si medimos con sillas o mesas”, reflexionó Paulina Zambrano, Educadora del Jardín Infantil Central del Servicio de Salud Metropolitano Occidente.

De esta manera, cualquier opción puede resultar válida a la hora de enseñar a niñas y niños. Fabricar soles, átomos y otros elementos baratos y útiles, es fácil si uno se lo propone, así lo planteó Víctor durante el desarrollo de la capacitación. 

Angélica Guerrero, Educadora de la Escuela Santiago de Guayaquil en Huechuraba, habló sobre su experiencia y cómo trabajará estas materias: “Mi interés en venir a este curso surge porque quiero tener un conocimiento más científico en relación a los planetas y aprender a abordarlo en la sala de clases. Estar en contacto con un experto nos sirve para retroalimentarnos, nos aporta conocimientos generales y además nos propone estrategias concretas que podemos adaptar con nuestros párvulos”.

Al finalizar la jornada, las educadoras pudieron entender, entre otras cosas, que el Sol es una fuente de energía, la distancia que nos separa de los demás planetas y la magnitud de nuestro Sistema Solar. 

Las siguientes sesiones tendrán lugar los días 30 de mayo y 7 de junio en la biblioteca Municipal de Santiago y el Cerro Calán respectivamente, culminando esta última en un recorrido por la historia de los telescopios y la Astronomía en Chile.