“Introducción de modelos para mejorar la producción y sustentabilidad ambiental del cultivo de maíz”, es el nombre del proyecto realizado por la Universidad de Chile (UCh), en asociatividad con la Cooperativa Campesina Intercomunal Peumo, cuyo cierre formal se realizó durante este martes en Rancagua.
En la oportunidad, se mostraron los principales resultados de esta iniciativa, que tuvo entre sus objetivos, vincular la ciencia con la empresa a través de la selección de modelos que permitieran incrementar los rendimientos, mejorar la calidad del grano y asegurar la sustentabilidad ambiental del producto.
Para tal efecto la Facultad de Ciencias Agronómicas de la UCh desarrolló un proyecto que tuvo un año de duración, a través de diferentes etapas; diagnóstico, vinculación (en el que participó la comunidad) acompañamiento y constitución de acuerdos.
“Es un paso fundamental, la transferencia tecnológica de todo lo que hacemos como facultad, se ha dado una instancia de trabajo en conjunto con agricultores en terreno, instituciones públicas, y asesores, con una mirada distinta de cómo abordar los problemas, sus posibles soluciones; para lo cual hicimos un acompañamiento en el proceso de mejorar la comunicación”, comentó Osvaldo Salazar, académico de esta casa de estudios.
La iniciativa fue financiada por Comisión Nacional de Ciencia y Tecnología (CONICYT) con recursos de la Provisión Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC) de la Región de O’Higgins: “Trabajamos con el gobierno regional, en el desarrollo de actividades de CyT orientadas a la innovación, (…) con el fin de desarrollar el capital social en la zona. Hay un problema de falta de información y de desconfianzas entre los usuarios, es por ello que se vincula a quienes demandan soluciones, con quienes tienen el conocimiento”, sostuvo Juan Paulo Vega, Director del Programa Regional de la entidad.
Rolando Escobar, Presidente de COOPEUMO, valoró precisamente que el proyecto se haya efectuado con la participación de los asociados, comentando que tuvieron un incremento en la producción entre el 5 al 10%; “aún queda como tarea ver qué hacemos con los rastrojos del maíz, para evitar las quemas, como por ejemplo el bioetanol”, sostuvo.
Al finalizar la ceremonia se realizó la firma del convenio de cooperación entre la universidad y la cooperativa, pues aún son varias las aristas que necesitan desarrollarse.
Nota: Carla Morales
Fotos: Esteban Reyes