La exactitud y precisión de los calendarios chino y maya se fundamenta en los profundos conocimientos matemáticos y astronómicos de ambas culturas, donde sus  las actividades sociales se regían por la agricultura y estaciones del año, coordinadas gracias a los calendarios. Mientras uno era un sistema vigesimal (se basa en unidades de a 20) y el otro trópico (que se mide en relación a la estrellas)  y sinódico (tiempo que tarda el objeto en volver a aparecer en el mismo punto del cielo respecto al sol, cuando se observa desde la Tierra), ambos seguían periodos orbitales de planetas como Marte y Júpiter. 

Fuente: SobrehistoriaTierras Mayas