La Liga de Clubes impulsada por el programa Explora, busca no solo brindar un acompañamiento, sino que también aportar componentes lúdicos al proceso investigativo de las y los estudiantes, generando en los participantes un mayor sentido de pertenencia. En este camino, sus participantes se dan cuenta que no son solo ellos los que están enfrentándose a este desafío, sino que hay más grupos en otros colegios y comunas que comparten las mismas aspiraciones.
Un sitio web exclusivo para la Liga dinamiza el proceso, dando visibilidad a los equipos participantes y proponiendo desafíos que les harán ganar puntaje de cara a la actividad final de la iniciativa, que se desarrollará en el mes de septiembre. Tareas como grabar un video de presentación del equipo, subir una foto con el director del colegio, fotografiarse desarrollando una actividad en terreno y crear un logo del club, son parte de los retos que deben sortear.
“Dentro de esta estrategia de acompañamiento, se plantean algunos desafíos para hacer el trabajo en equipo más dinámico y entretenido, de manera que el estar en la liga es una experiencia lúdica y educativa. Con esta estrategia y gracias al acompañamiento de los asesores científicos, se mejora la calidad de los proyectos que se presentan en el Congreso Provincial”, explica la Coordinadora Ejecutiva del PAR Explora Biobío, Rocío Cruces
Para desarrollar proyectos de calidad, la Liga de Clubes cuenta con el apoyo de más de 40 investigadores de
diferentes áreas de las ciencias, quienes se comprometen a asesorar directamente a los grupos, dándoles la oportunidad de recibirlos en sus laboratorios y lugares de trabajo, ayudándoles a definir los pasos a seguir y los objetivos que deben ir cumpliendo.
La Subdirectora de Extensión del lnstituto Milenio de Oceanografía (IMO), Bárbara Léniz, comenta: “Esto es muy importante, porque más allá de los conocimientos que uno les pueda entregar, es abrirles un mundo de posibilidades que antes desconocían. Es bueno que ellos puedan acceder con facilidad a estos espacios, para que vean que ellos también pueden transformarse en grandes científicos y trabajar con tecnología y laboratorios de punta, como los que hay acá en la Universidad de Concepción (UdeC)”.
Así mismo, la bióloga marina y asesora científica de la iniciativa, Loreto Arriagada, argumenta: “Este modelo de trabajo ayuda a los niños a guiar toda esa energía que tienen –que a veces hace que el trabajo se disperse un poco– y direccionarla de mejor forma al proyecto. Lo que es posible gracias al apoyo que brindamos nosotros. En general, los niños están muy motivados a aprender, vienen con muchas dudas, con muchas preguntas y este trabajo conjunto los orienta y ayuda a que sigan haciéndose más preguntas como buenos investigadores”.
El profesor José Carrera, del Colegio Fraternidad de San Pedro de la Paz, considera que para los estudiantes es súper importante trabajar con científicos, porque muchas veces se piensa que éstos están en otro nivel. “Además, esto les ayuda mucho a comprender qué es lo que quieren investigar y alcanzar sus objetivos. También les permite relacionarse con el mundo universitario, con las ciencias y las tecnologías, desarrolla en ellos capacidades y aptitudes que quizás niños que no han participado en estas instancias no las tienen”, explica.
Noemí Carvallo, estudiante del Centro Educacional de la Madera de Coronel y participante de la Liga, está trabajando en un proyecto que busca desarrollar una tecnología que permita crear una protección de plástico reciclado para la madera. En relación a su experiencia, rescata el valor de estar aprendiendo competencias que le servirán ahora y más adelante. “Algo que nos ayuda bastante es que nos capacitan para poder hacer nuestras investigaciones, porque así podemos hacer buenos proyectos, y también nos sirve a futuro, porque ya tenemos la organización y sabemos cómo realizarlos”, señala.
Maura Montoya, estudiante del Colegio Villa Nonguén de Concepción, está desarrollando una investigación en la que se propusieron crear un acelerador de compost, en base a placas térmicas que utilizan energías limpias. Cuenta que en la Liga ha aprendido a trabajar de manera más ordenada. “Trabajar así, con un orden en las cosas que tenemos que ir haciendo, nos sirve para que más adelante, cuando tengamos ideas locas, las podamos llevar a cabo siguiendo ciertos pasos, como eso de poner la metodología, la pregunta de investigación, etc. Eso encuentro que es súper bueno para ir generando ideas y llevarlas a cabo”.
Para facilitar un poco más las cosas, la Liga de Clubes también ofrece financiamiento a los equipos participantes, presupuesto al cual deben postular detallando en qué se invertirá. Este monto sirve para costear algunos insumos y salidas a terreno, entre otros ítems que cada grupo define como prioritario.
En el camino hacia el Congreso Provincial, que se desarrollará durante la semana de la ciencia, tres son los talleres en los que deben participar, dos de los cuales ya se realizaron. El primero de ellos estuvo orientado a dar los primeros pasos de una investigación, redactando el marco teórico, formulando las preguntas de investigación y definiendo la hipótesis. El segundo encuentro tuvo que ver con proponer en forma más concreta la investigación, pulir los objetivos y trabajar en el diseño experimental, además de acotar la investigación para que sea factible, coherente y de alto impacto. En el último taller se trabajará en procesar y analizar los resultados, además de trabajar en torno a las habilidades comunicativas a la hora de exponer sus trabajos.
Los clubes de investigación tienen plazo hasta el 6 de septiembre para postular al XI Congreso Provincial Escolar de la Ciencia y la Tecnología Explora, instancia en la que además de mostrar sus trabajos a la comunidad, podrán compartir experiencias, conocer equipos de otros establecimientos educacionales o comunas de la misma provincia.
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