El tercer encuentro presencial del Programa de Indagación para Primeras Edades (PIPE), proyecto ejecutado por la Vicerrectoría de la Universidad Católica, reunió a 95 profesionales de la educación para reflexionar en el taller “Perspectiva de Género”. El objetivo de las dos jornadas se centró en la construcción de conocimientos, tanto de la teoría como desde la reflexión, para diseñar experiencias de aprendizaje e interacciones pedagógicas que permitan el desarrollo de competencias de niñas como niños, por igual.
La jornada contó con la relatoría de Claudia Matus, directora del Centro de Justicia Educacional y profesora titular de la Facultad de Educación de la Universidad Católica. Su exposición se centró en las características atribuidas a niños y niñas, y en que la norma binaria de género, mediante ciertas prácticas, puede producir discriminación o desigualdad en ambientes educativos. “Numerosas investigaciones ya están dando cuenta de que, a los seis años, niños y niñas ya vienen con la idea de diferenciar entre hombres y mujeres. Es súper importante entender que esta diferencia en sí misma no es el problema, sino que esto ocurre cuando esa diferencia implica que hay un grupo en un estatus menor valoración. La diferencia en sí misma es genial. El tema está en que cuando esa diferencia a mí me dice que por ser mujer o por ser niña, yo tengo que hacer cosas que van a ser menos valoradas o que van a ser desestimadas”, comentó Claudia Matus.
Junto a esto, recomendó capacitarse en género a quienes trabajan en niveles parvularios para entender qué implica el asignar roles y estereotipos a niños y niñas. “Cuando hablamos de género, lo que sabemos es de acuerdo con cómo hemos sido socializadas en género. Pero eso no es saber sobre género. Hay que formarse y prepararse para enfrentar estas demandas que son sumamente necesarias. Si efectivamente queremos tener sociedades más justas, sociedades más igualitarias, esto es vital”, agregó.