Escrito por Cintia Beltrán Gómez
Promover competencias científicas en los equipos pedagógicos ha sido uno de los objetivos trascendentales de Explora Ñuble en sus dos primeros años de ejecución. Teniendo en cuenta que los niños y niñas a través de la curiosidad y el interés genuino por descubrir tratan de explorar y explicar el mundo que los rodea.
En este sentido la Dra. Inés Figueroa, directora del PAR Explora Ñuble, expresa que “durante 2020, trabajamos en el fortalecimiento de las competencias científicas en las profesionales de la Educación Parvularia, educadoras y técnicos de nivel superior, para propiciar el desarrollo del enfoque indagatorio con actividades lúdicas e interactivas para niños y niñas, abordando áreas como la botánica y la zoología. El trabajo conjunto desarrollado con la Subsecretaría de Educación Parvularia y la Secretaría Ministerial de Educación de la Región de Ñuble permitió llegar a 20 comunas. Sin duda, la amplia territorialidad de este instrumento pedagógico nos insta a seguir trabajando en red para enfrentar los desafíos educacionales con herramientas y estrategias”.
Las educadoras participantes de PIPE corresponden a las comunas de Chillán, Bulnes, Chillán Viejo, El Carmen, Pemuco, Pinto, Quillón, San Ignacio, Yungay, San Carlos, Coihueco, Ñiquén, San Nicolás, Quirihue, Cobquecura, Coelemu, Ninhue, Portezuelo, Ránquil y Trehuaco. Por medio de 20 horas lectivas trabajaron en el enfoque indagatorio para promover en el aula las fases de focalización, experimentación, reflexión y aplicación.
La indagación como vehículo para el desarrollo de competencias científicas en edades tempranas
El National Research Council de Estados Unidos, define a la indagación como una actividad multifacética que involucra hacer observaciones y preguntas, examinar libros y otras fuentes de información para proponen explicaciones basadas en la evidencia derivada del trabajo que se realizó.
El experto en indagación y relator de PIPE, Ariel Araneda Cancino, comenta que “la indagación científica corresponde a un enfoque pedagógico centrado en los y las estudiantes, en donde el educador o educadora orienta la construcción de conocimientos científicos a través de distintas actividades que los involucran y comprometen en la búsqueda de respuestas a preguntas que surgen de problemáticas de su entorno. Lo anterior se articula enormemente con la labor que se realiza en educación parvularia, pues fomenta la curiosidad a partir de la experimentación y la exploración”.
El modelo de competencias científicas de Explora busca desarrollar el: Actuar con curiosidad, Buscar oportunidades de indagación, Descubrir alternativas de solución, Experimentar para responder preguntas y Comunicar el trabajo realizado.
Lilian Osorio, educadora de la Escuela Puerta de la Cordillera de la comuna de Pinto, explica que “en relación a las competencias científica del Programa Explora mi aprendizaje fue que cada una de ellas permiten que los niños y niñas sean seres reflexivos, curiosos, innovadores, con pensamiento crítico del mundo que los rodea. Todo esto hace que los párvulos vayan siendo personas autónomas donde por sí mismos van a ser capaces de indagar. Sin duda, como educadora considero que es nuestra responsabilidad que esto ocurra”.
Por su parte Oriele Carreño Carrasco, educadora de educación parvularia de la Escuela Chacay de la comuna de Ñiquén, expresa que “conocer el tren de ideas de cómo intencionar preguntas investigables y cómo desarrollar la observación e indagación en los niños y niñas a través de actividades de ciencia, aplicada a todos los ámbitos y núcleos de aprendizaje, permite que se desarrollen preguntas en el aula que estimulen la curiosidad, observación e imaginación. Al mismo tiempo, se promueve en los párvulos que sean individuos reflexivos y comunicativos. Exploradores del medio a través del trabajo en equipo”.
El programa PIPE presenta dos módulos independientes, pero complementarios, uno centrado en plantas y otro en animales en los que se presenta una mirada sistémica y amplia para mejorar las oportunidades educativas enfatizando la interacción y comprensión del entorno.
Durante la ejecución contamos con la relatoría María Angélica Urbina, docente de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Concepción, Campus Chillán, quien desarrolló el módulo de botánica.
Mientras que el Dr. Daniel González, docente de la Facultad de Cs. Veterinaria de la misma casa de estudios, lideró el módulo de zoología destacando su calidad humana y su pasión por la vida silvestre. Dedicamos esta nota a su familia y al mismo tiempo reconocemos su tremenda labor en los equipos pedagógicos de educación parvularia de Ñuble a través de su trabajo y dedicación en talleres como “El ciclo de la vida: Conexión vital entre animales y humanidad”, “Javier el guardaparque: Protector de la fauna chilena”, entre otros.
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