En Chile, en promedio, se genera 1,19 kilos de basura al día por habitante, del cual, solo se recicla el 1%. Pero, ¿sabemos cómo y cuándo reciclar? ¿Sirve reciclar si no bajamos nuestros niveles de consumo?
Cada vez que levantas la tapa de tu basurero y dejas ahí tus desechos (porque imaginamos que allí los depositas, ¿cierto?) te has preguntado alguna vez, ¿cuántos de esos elementos podrían tener una segunda, o varias vidas, en vez de acumularse en los sitios que cada ciudad destina para la basura de sus habitantes?
Según el Informe del Estado del Medio Ambiente 2020, en Chile el 2018 se generó un total de 8.177.448 toneladas de residuos municipales o domiciliarios, con una población proyectada de 18.751.405 habitantes, lo que significa un promedio de 1,19 kilos al día por habitante, del cual, solo se recicla el 1%.
Reciclaje e inclusión social
En La Serena existe la Fundación La Tribu Somos, proyecto de innovación social, reciclaje e inclusión en pro de niños, niñas y jóvenes con autismo. Lorena Figueroa Campusano, es su Presidenta y fundadora, y cuenta que reciclan polietileno de alta y baja densidad (2 y 4), con el cual fabrican diversos productos decorativos y funcionales (bisutería, agendas, cuadernos, croqueras, individuales, posavasos, uñetas, botones, llaveros), “utilizando como materia prima nuestros propios residuos plásticos domiciliarios”, destaca.
Asimismo, Lorena explica que se decidieron por el reciclaje como sustento económico de su fundación porque comprenden que el plástico no es basura: “es un recurso valioso y versátil que permite a todas las personas aprender a crear desde una correcta gestión de sus residuos”, e igualmente, agrega que los productos que fabrican “son de alta calidad y están hechos con amor, con conciencia ecológica y social, respetando la trazabilidad del plástico y buscando una mejora continua en los diseños y empaques”, resalta.
Sobre el sentido de reciclar, en atención a la situación medioambiental actual del planeta y del país, Lorena afirma que reciclar debiese ser la última opción que se piense respecto a un residuo. “Primero, debemos rechazar lo que no necesitamos. Segundo, reducir al máximo el consumo de productos cuya disposición final termine en los rellenos sanitarios, y tercero, compostar como un imperativo ético”. Igualmente, subraya que Chile está en deuda, especialmente en regiones, respecto a inversión en plantas de reciclaje, “pues por más que separemos nuestros residuos en casa y los llevemos a un punto limpio, el traslado a Santiago también genera contaminación”, destaca.
Disminuir el consumo
Respecto a la relevancia del reciclaje en el contexto de la situación medioambiental actual del planeta y del país, la Coordinadora y Director del programa de Ciencia Ciudadana “Científicos de la Basura”, Geraldine Holtmann y Martin Thiel, respectivamente, señalan que lo fundamental es disminuir nuestro consumo, ya que el reciclaje sí ayuda a combatir el plástico, “pero no es la mejor solución a este problema. Por otra parte, lo mejor es usar productos reutilizables y duraderos: ¡la mejor cuchara la que te puede durar para toda la vida!”, afirman.
Asimismo, recomiendan dar mayor valor a los objetos que utilizamos y que se adecuan a nuestro estilo de vida y necesidades: “si valoramos ese objeto que será único para nosotros, no necesitaremos comprar más, es decir, podríamos valorarlo, cuidarlo y reutilizarlo muchas veces, logrando reducir nuestro consumo”, destacan.
Respecto a la comprensión por parte de la ciudadanía sobre cómo y cuándo reciclar, la y el experto reconocen que, si bien, existen muchas iniciativas que impulsan la educación en gestión de residuos, es importante continuar enseñando a la ciudadanía respecto a los tipos de residuos que son reciclables, de qué manera llevarlos a los puntos de reciclaje y cuáles son reciclables
Asimismo, explican, de todo el plástico que utilizamos, “sólo se pueden reciclar aquellos envases que tienen indicado: N° 1 – El plástico PET, es uno de los plásticos que encontramos con más frecuencia en botellas de agua, jugos y bebidas. N° 2 – (HDPE), está presente en envases de detergente, shampoo, lácteos, tuberías, maceteros y bolsas plásticas. N° 5 – (PP), envases de yogurt, los pocillos para las salsas de sushi, tortas, tapas de bebidas y bombillas. Asimismo, en la mayoría de los lugares de reciclaje se incluyen también metales, cartón y papel”.
Finalmente, señalan que el circuito interactivo “Compartiendo Caleta la Ciencia”, ubicado entre la Caleta de Guayacán y la Universidad Católica del Norte, en Coquimbo, aborda esta temática en una de sus cinco estaciones: “Caleta de impacto”. (http://www.cientificosdelabasura.cl/es/noticias/88/estacion-caleta-de-impacto).
