“Pero no todo está dicho, nos queda mucho por avanzar en el desarrollo de la ERNC. Recordemos que las ERNC están sujetas a los recursos inagotables que poseemos en el mundo, pero que en la mayoría de las veces no se presentan con continuidad”, señala el autor.
Por: Álvaro Toro Marmuth
Ejecutivo de Competitividad e Innovación
Eje Energía, Corporación Regional de Desarrollo Productivo Región de Coquimbo
“Las Energías Renovables No Convencionales (ERNC) cada día se están enlazando en nuestras vidas, incluso llegando al punto en que el termino es “las Energías Renovables” a secas, ya que no tienen nada de no convencionales. Para entender lo que son las ERNC, las definiremos como la energía obtenida o colectada de recursos renovables, los cuales son naturalmente reemplazados en una escala de tiempo humana. Con esto en mente, entenderemos que el sol, el viento, las mareas, biomasa y los ríos son algunos de los recursos que dan vida a las ERNC.
En nuestro país las ERCN, están jugando un papel protagónico desde ya hace unos años. En el 2016 el Climascope elaborado por Bloomberg New Energy Finance, otorgó a Chile el primer lugar en la inversión de ERNC y lucha en contra el cambio climático en América Latina y el Caribe, y segundo a nivel mundial. Esto se debe a que nuestra nación en el 2015 tuvo una inversión de 3200 Millones de Dólares, la cual duplico la inversión con respecto al 2014. Actualmente en Chile Provee con un 17% de su matriz energética por medio de ERNC, concordando con el proyecto de ley 20/20, que impulsa para el año 2020 que 20% de la matriz energética chilena provenga de las ERNC.
En la Región de Coquimbo, contamos con un gran aporte de ERNC con los parques eólicos instalados en la zona costera entre Tongoy y los Vilos, el primer proyecto solar fotovoltaico de Pequeño Medio de Generación Distribuida (PMGD), proyectos solares en diferentes localidades de la región y con la instalación de un centro de investigación marina para pruebas de prototipos en la costa de la comuna de Canela, por parte de MERIC.
El potencial de la región se ha desarrollado por medio un programa piloto, llamado “Plan Energético Regional” el cual en forma territorial se planificó los futuros proyectos de energía y se identificaron los potenciales de la zona, con una suma no mayor de 2,7 GigaWatt de energía eólica y con cerca 90 GigaWatt en Fotovoltaica con un eje de seguimiento. Por otro lado, la demanda de energía que se proyecta con los futuros proyectos mineros nos deja un gran desafío en el autoabastecimiento regional, ya que incluso hoy, tenemos que importar de otras regiones la energía que viene de recursos fósiles como el carbón.
Pero no todo está dicho, nos queda mucho por avanzar en el desarrollo de la ERNC. Recordemos que las ERNC están sujetas a los recursos inagotables que poseemos en el mundo, pero que en la mayoría de las veces no se presentan con continuidad. Nuestra región cuenta con recursos eólico y solares que están intermitentemente aportando, por lo que no podemos generar energía el 100% del tiempo. He aquí nuestro gran desafío como país y sobre todo en el área de la investigación, de cómo aumentamos este porcentaje de aporte. Tenemos que lograr que nuestras plantas de ERNC logren tener menos intermitencias, mejorando las tecnologías de almacenaje eléctrico, la distribución eléctrica sea más eficiente (Smart Grid), la conversión de las celdas fotovoltaica sea mayor y predecir con mayor exactitud el cómo se presentará el recurso (eólico o marino).
En resumen, actualmente sabemos dónde y cuánto producir, pero debemos seguir desarrollando mejores tecnologías para que los proyectos sean aún más rentables, y que la matriz energética alcance el 70% de aporte ERNC para el año 2050, como lo define en una de sus metas la Política Energética Nacional. Recordemos que la energía es el impulsor de todo lo que vemos, asegurémonos que esta sea amigable con el planeta”.
*Fotografía: Wikimedia CC.
